Una creación periodística de Luis Pedro Toni

Benjamín Vicuña relató cómo contuvo a Pampita tras la muerte de Blanca

Benjamín Vicuña publicó su libro Blanca, la niña que quería volar y causó una gran conmoción con la historia que relató en sus páginas. En medio de la repercusión por el lanzamiento, el actor chileno brindó una entrevista para un programa de su país natal y contó cuál fue el rol que él ocupó en su familia tras la muerte de la pequeña que tuvo con Pampita Ardohain.
 
“Quedaste golpeado y tu pareja Carolina también. ¿Cómo la apoyaste si estabas igual de devastado que ella?”, quiso saber Edgardo Fuentes, el conductor de Buenas noches a todos (TVN). Fue así que Vicuña recordó cómo fueron esos primeros momentos sin Blanca en su casa: “Yo entendí el mismo día que no podía flaquear, no podía caer. Pasé a ser un sostén, contenedor, de todos, de mis hijitos y de mi mujer”.
 
“Tenía que mirar el horror en los otros, y había una determinación de que yo no podía caer”, dijo Benjamín con sinceridad. “Fue lo que nos nació. Y por eso creo que mi proceso fue involutivo, porque diez años después yo estaba sufriendo diez mil veces más que en ese momento”, explicó.
 
Además, recordó cuáles eran los métodos que aplicaba aquellos días para intentar sacarles una sonrisa a sus hijos y a Pampita. “En un principio, con mucho dolor y todo, yo tuve que ser el hombre, el padre, el proveedor, salir a trabajar. Decía ‘el día está lindo’, ‘hagamos deporte’”, lanzó el actor e hizo énfasis en que “la ola” le llegó “tarde”.
 
Sobre esa misma línea, Benjamín se refirió a la importancia de los buenos amigos que lo rodeaban y de cómo ellos lograron darle fuerzas en aquel momento tan duro. “No sé si me va a quedar vida para agradecerles. Se organizaron para estar todos los días, eran una red de apoyo. Iban al supermercado, pagaban las cuentas, llevaban los niños a la escuela. Venían a almorzar y con bolsas de cosas”, detalló Vicuña sobre sus amistades.
 
“Carolina se despertaba todas las noches preguntando desesperada dónde estaba su Blanquita. Se levantaba de la cama, caminaba por el pasillo e iba a su cuarto. La buscaba como una leona desesperada. Yo solo podía abrazarla, contenerla y responder: ‘Nuestra niña está bien, está en un lugar mejor’. Como una frase que se repite, como un texto aprendido de una escena mala”, señaló Benjamín Vicuña en uno de los fragmentos de Blanca, la niña que quería volar.
 
El actor chileno también expuso que su libro es una expresión desbordada y honesta de la experiencia que le tocó vivir. “Una tragedia que me atravesó como un rayo y me dejó vacío. Me costó años asimilarla y de alguna manera sigo transitando el desierto; pero seguí viviendo. En estas páginas hablo acerca de mi niña y mis pesares. También de las herramientas que me sirvieron para iluminar noches oscuras. Espero que puedan servirle a alguien. Que quienes están atravesando una pérdida; sufriendo o acompañando un duelo; puedan encontrar algo de alivio y esperanza. Una pequeña luz en mitad del océano cuando no vemos la orilla”, comentó.