En el estadio único de La Plata, Los Piojos regresaron con un show inolvidable, fusionando nostalgia y energía. La banda, liderada por Andrés Ciro Martínez, desplegó su magia con canciones emblemáticas y momentos conmovedores. Fue la primera de varias citas en este regreso tan esperado de una de las bandas más significativas del rock argentino. 

La noche comenzó con “Te diría” y “Desde lejos no se ve”, encendiendo la euforia del público. Ciro, con una chaqueta bordó, saludó con una frase cargada de significado: “Buenas noches, esto está sucediendo”. La emoción era palpable, la conexión entre la banda y su audiencia, inexplicable.

La velada incluyó homenajes a Diego Maradona y Tavo Kupinski, con momentos emotivos y visuales impactantes. “Bicho de ciudad”, “Reggae rojo y negro” y “Fantasma” destacaron por su intensidad, demostrando que la música de Los Piojos sigue siendo un reflejo del alma argentina.

Un momento singular ocurrió cuando Alejandro Dell´Osa, un fanático, subió al escenario y compartió un discurso conmovedor: “Volvimos, loco, volvimos. Los Piojos siempre estuvieron y nosotros nunca nos fuimos”. Su voz, llena de emoción, resonó en el estadio, simbolizando la unión entre la banda y su público.

El show culminó con “Verano del 92”, un himno que desató una murga en el escenario, con los hijos de los músicos unidos en una celebración intergeneracional. La energía fue contagiosa, la alegría, incontenible.

Los Piojos demostraron que su legado trasciende el tiempo, conectando con una audiencia que nunca los olvidó. Su regreso es un testimonio de la poderosa conexión entre la música y la emoción, un recordatorio de que, en la música, siempre hay un pedacito de nosotros.

La noche del 17 de diciembre de 2024 quedará grabada en la memoria de los fanáticos, un momento que nunca será olvidado. Los Piojos están de vuelta, y su música, más viva que nunca.

Por Fabián Volpe